El día 21 de abril se presentará en el Club de Prensa de La Nueva España de Oviedo, la II Ruta Vaqueros de Alzada Las Regueras-Torrestio que se celebrará los días 8,9 y 10 de mayo.
En, la mesa estarán José Ramón Pando, concejal de Turismo del Ayuntamiento de Oviedo, María Isabel Mendez , alcaldesa de Las Regueras, Basilio Barriada, alcalde de San Emiliano (Leon), Jaime Izquierdo, experto en desarrollo rural y María Teresa Rodriguez, promotora del proyecto. Todo ello coordinado por Maria Jose Fernandez, agente de desarrollo local del Ayuntamiento de Santo Adriano. La presentación oficial a la prensa ya se realizó en Las Regueras el 23 de marzo.
Este proyecto comenzó a gestarse a principios de 2014 partiendo de una idea de Maria Teresa Rodriguez, descendiente de vaqueros de alzada de Las Regueras y con estrecha vinculación familiar con Torrestio. El Ayuntamiento de San Emiliano celebraba aniversario y era un buen motivo para comenzar la aventura. Tuvo una pronta y favorable respuesta en Las Regueras, que debía desde hace tiempo un homenaje a sus vecinos que desde hace siglos practicaban este tipo de vida trashumante.
La acogida fué tambíen un éxito en los municipios de paso, Oviedo,Santo Adriano, Teverga, Quiros y Proaza, que desde tiempos lejanos son testigos del paso de esta caravana de hombres, mujeres, animales y enseres que cambian de residencia en función de la estación. Gratos recuerdos guardan de los tiempos donde la solidaridad y la cooperación, tan olvidadas en la actualidad, eran una parte fundamental de esa forma de vida campesina.
A principios de mayo de 2014, cuando la primavera comenzaba a pedir paso en "las marinas" y en las altas tierras babianas el sol terminaba de derretir las últimas muestras del invierno, una mañana de viernes nos reunimos en el Castañeu de Cartuchos ( actual Casa Edelmiro) en Biedes, dispuestos a rememorar por diversos motivos el viejo camino de la "alzada"; Alfonso el gaitero de Las Regueras nacido y criado en Parades, tierra de vaqueros, y Norinin de Torrestio, el hijo de la poetisa vaquera, animaban a los presentes que comenzaban un viaje al pasado y un tributo a sus ancestros.
Tras pasar Escamplero, cruce importante de caminos, el sendero discurre hasta llegar a San Pedro de Nora, la joya del prerromanico reguerano, donde el río de mismo nombre separa Oviedo de Las Regueras. En Trubia el grupo se unió a los descendientes de vaqueros de Latores y la Senda Verde nos llevó hasta Villanueva de Santo Adriano, donde no se puede pasar sin pararse a admirar "El Cielo de Zacarias", una tienda-kiosko-bar con una cuidada y exquisita decoración que mima con esmero su dueña, Arancha.
El camino continua y Proaza era el destino del primer día. Los caminantes reposan en los bares de la plaza de este pequeño y tranquilo lugar, donde los osos viven como reyes, es su casa, la Senda del Oso, antiguas vías de ferrocarril minero y de peñas escarpadas.
La segunda etapa fue un alegre paseo de sábado culminando en el pueblo ejemplar de Teverga que nos recibió con el abrazo de antaño. Nos enseñaron su colegiata y nos deleitaron con una pequeña obra de teatro. El plato fuerte de la tarde nos lo brindó Celso Peyroux, cronista oficial del concejo, sabio maestro de la comunicación, que con su palabra calmada consiguió que las emociones y los recuerdos de los allí presentes brotasen para ser conscientes desde entonces que la ruta no era una mera excursión de fin de semana, era un merecido homenaje a los hombres y mujeres que un día transitaron por el valle de Teverga construyendo una historia, la de los vaqueros de alzada del centro de Asturias. Merece mención el emocionado testimonio de Ismael de Xiromo de Parades (Las Regueras.
El tercer día casi subimos a los cielos, que alto está la braña de Las Navariegas y que satisfacción hacer cumbre. Quedan las imágenes........ Sobran las palabras y falta el aire.....
Llegada a la meta. Torrestio. .....Aquí ya no quedaba ni el aire.
Quedan pisadas, trote de caballos, música babiana..
Quedan los recuerdos, las anécdotas, algunas inconfesables, otras emotivas.
Quedan los recuerdos de las personas que conocimos gracias a la ruta; Carmen, la montañera; Octavio el alpinista con madreñas; Selina,la vaquera auténtica, Cesar, nuestro guia particular, babiano de pro; Ismael y su coche escoba, Norinin y su música, Isa y Patri las amazonas... que culminaron la hazaña en dos días por los puertos de Maravio y la Mesa como el resto de jinetes y q sonríen cuando miran al caballo.
Por eso volvemos porque tanta historia merece ser recordada al menos una vez al año.
Continuará ...............